Cuando llega la primavera, más de uno está expectante para captar las imágenes más sorprendentes y coloridas de las flores con su cámara fotográfica. En estas instantáneas los insectos también tienen un papel importante, puesto que en ocasiones una imagen de una abeja sobre una flor puede llegar a ser lo que un fotógrafo esté buscando a la hora de hacer fotos relacionadas con la primavera.
En primavera es cuando se da el fenómeno de la polinización, el proceso en el que el polen es trasladado de unas plantas a otras, gracias a agentes polinizadores como el viento, o algunos insectos como las abejas. Las abejas son el principal agente polinizador, y gran parte del proceso de polinización a nivel mundial se produce gracias a ellas.
Las abejas, así como el resto de agente polinizadores que actúan en el proceso, tienen como tarea recolectar el polen de diferentes flores asexuales o masculinas, y trasladarlo a aquellas flores femeninas, las cuales, al entrar en contacto con el polen hacen que se de origen los frutos.
Una alergia es una reacción excesiva de nuestro organismo ante el contacto de determinadas sustancias como puede ser, una comida, ácaros del polvo e incluso el propio polen de las plantas. Este último caso es uno de lo más habituales entre la población.
Esta reacción se produce desde el momento es que nuestro cuerpo entra en contacto con el polen, y nuestro cuerpo activa las defensas, produciéndose con ello, los tan conocidos síntomas de la alergia al polen.
La alergia al polen puede causar diferentes síntomas. Los más comunes son los siguientes:
- Lagrimeo, picor, enrojecimiento del ojo y otras reacciones
- Inflamación de la mucosa nasal que causa congestión y goteo nasal
- Estornudos frecuentes
- Hinchazón debajo de los ojos
- Fatiga
- Irritabilidad
- Dolor de cabeza
- Dificultades para conciliar el sueño
- Asma bronquial
Nuestra vitamina D está íntimamente relacionada con muchas de las funciones del organismo, entre éstas se encuentra el sistema inmunológico, relacionado con la respuesta inmune con que se caracterizan las reacciones alérgicas. Una ingesta adecuada de alimentos que contengan vitamina D, una exposición a los rayos solares también adecuada y la suplementación suficiente de este nutriente, hará que nuestro cuerpo pueda hacer frente a estos problemas con mucha más ventaja.