El Día del Informe… de nuestro cuerpo

En la población de todo el mundo, y gracias a diferentes estudios epidemiológicos, se calcula que hay más de mil millones de personas con un nivel menor al normal de vitamina D en su sangre, esto significa que al 13.3% de todos los seres humanos nos falta, de alguna manera, algo de vitamina D y lo peor es que se estima que esta cifra seguirá creciendo en todo el mundo, en todas las razas y en todas las edades.

Como se mencionó en otra de nuestras entregas, la obesidad es una de las causas de deficiencia de vitamina D ya que evita que ésta esté disponible en nuestro cuerpo para su consumo, y si tomamos en cuenta que la epidemia mundial de obesidad crece de manera alarmante, el déficit de vitamina D crecerá lógicamente. Si a eso le sumamos otros factores como la poca exposición al sol, el color de la piel, el uso de filtros solares y la poca ingestión de alimentos que contienen este nutriente, el número seguirá en aumento.

México, por supuesto, no es la excepción. Gracias a diversos estudios hechos por expertos y en instituciones de alta calidad en investigación médica, se llegó a la conclusión de que, la insuficiencia de vitamina D en la población de adolescentes y adultos es de 23%, en tanto que la deficiencia en el mismo grupo quedó en 13%. Sin embargo, y por otros datos en esos estudios, puede determinarse que esta insuficiencia o deficiencia de vitaminaD está, definitivamente, subdiagnosticada.

Lo que sí debe hacerse es seleccionar adecuadamente a los candidatos que deben hacerse una prueba de medición de los niveles de vitamina D. Por eso a continuación enlistamos los padecimientos en los que debe buscarse intencionadamente la falta de vitamina D:

Osteoporosis

Enfermedad renal crónica

Falla hepática

Obesidad

Síndromes de malabsorción

Fibrosis quística

Enfermedad inflamatoria intestinal

Enfermedad de Crohn

Cirugía bariátrica

Enteritis por radiación

Medicamentos

Anticonvulsivos

Glucocorticoides

Fármacos para SIDA

Niños y adultos Afroamericanos e Hispanos

Mujeres embarazadas y en lactancia

Adultos mayores con historia de caídas

Adultos mayores con historia de fracturas no traumáticas

Enfermedades granulomatosas

Tuberculosis

Algunos linfomas

Si algún familiar o uno mismo está en alguna de estas situaciones, no dude en preguntarle a su médico por el examen de sangre para determinar sus niveles de vitamina D. Más vale prevenir que lamentar. También es pertinente consultar con el médico, si se está en alguna de estas condiciones, acerca de la conveniencia de complementar la dieta y tomar suplementos de vitamina D.